Transferencia de dominio

La transferencia de dominio es el proceso mediante el cual cambias el registrador (empresa con la que gestionas tu dominio) a otro nuevo, manteniendo siempre la titularidad del dominio a tu nombre.
En la práctica, significa que tu dominio pasa a estar gestionado por un proveedor distinto, desde el cual podrás renovar, administrar la zona DNS, activar seguridad adicional como DNSSEC o configurar redirecciones.
Es importante saber que una transferencia no cambia el contenido de tu web ni el correo electrónico asociados al dominio, únicamente traslada la gestión administrativa y técnica del mismo.

El tiempo de transferencia varía según la extensión del dominio (TLD). En la mayoría de los casos, el proceso tarda entre 5 y 7 días hábiles desde que se inicia y se confirma el código de autorización (EPP o AuthCode). Algunos dominios pueden completarse en menos tiempo, mientras que otros requieren la confirmación manual por parte del registrador actual. Durante este período tu web y correo seguirán funcionando con normalidad.

El código EPP (también llamado AuthCode o clave de autorización) es una contraseña única generada por tu registrador actual, necesaria para autorizar la transferencia de tu dominio a otro proveedor. Puedes solicitar este código desde el panel de control de tu actual registrador o poniéndote en contacto con su soporte técnico. Sin este código no se puede iniciar la transferencia, ya que actúa como medida de seguridad para evitar transferencias no autorizadas.

Sí, aunque existen algunas limitaciones: los dominios recién registrados o recientemente transferidos no pueden volver a transferirse hasta pasados 60 días, según normativa de ICANN y de la mayoría de registros. Además, tu dominio debe estar activo y no estar en estado de bloqueo (Registrar Lock). Por eso es importante revisar la fecha de expiración antes de iniciar el proceso, para evitar que caduque durante la transferencia.

Al transferir un dominio, normalmente se añade un año extra de registro al plazo actual, por lo que no pierdes tiempo ya pagado.
Por ejemplo, si tu dominio .com caduca en junio de 2026 y lo transfieres hoy, pasará a caducar en junio de 2027.
Sin embargo, hay excepciones: los dominios .es y aquellos cuya transferencia es gratuita no añaden un año adicional. En esos casos, la fecha de caducidad se mantiene.

No es recomendable esperar a que tu dominio caduque. Para poder transferirlo, el dominio debe estar en estado activo. Si ya ha caducado, deberás renovarlo primero con tu registrador actual y, una vez activo, iniciar la transferencia. De lo contrario, existe el riesgo de perderlo si entra en período de redención o es liberado para registro por terceros.

La transferencia de un dominio no afecta automáticamente al funcionamiento de tu web ni de tu correo electrónico, ya que durante el proceso los nameservers configurados permanecen sin cambios. Esto significa que, en condiciones normales, tu página web y tus cuentas de correo seguirán funcionando con total normalidad mientras el dominio se transfiere.

No obstante, es importante tener en cuenta lo siguiente:

– Algunos registradores, al perder la gestión del dominio, eliminan la zona DNS asociada. En ese caso, tu web y tu correo podrían dejar de funcionar si los nameservers que utilizabas pertenecían a ese registrador.

– Para evitar cualquier interrupción, te recomendamos verificar en tu registrador actual si los nameservers y la zona DNS seguirán activos tras iniciar la transferencia.

Si sospechas que pueden eliminarlos, lo ideal es que nos contactes antes de transferir el dominio. Podemos migrar tu zona DNS a nuestros servidores para que todo siga funcionando sin cortes y tengas la tranquilidad de que tu web y tu correo permanecerán siempre accesibles.

El coste depende de la extensión del dominio. En la mayoría de los casos, la transferencia tiene un precio similar al de una renovación anual e incluye un año adicional de registro.
Algunas extensiones, como los .es, pueden transferirse de forma gratuita, pero en estos casos no se amplía la fecha de caducidad.

Sí. La transferencia está regulada por ICANN y por las entidades que gestionan cada extensión.
Para garantizar la seguridad, todos los dominios cuentan con medidas como:

– Bloqueo de transferencia (se debe desactivar antes de iniciar el proceso).

– Código de autorización EPP, único y personal.

– Confirmación por correo electrónico enviada al titular o administrador del dominio.

Estos pasos aseguran que solo el propietario legítimo pueda autorizar la operación.

Cuando inicias una transferencia, tienes un plazo (habitualmente de 5 días) para aceptarla en el correo de confirmación que recibirás.
Si no realizas la validación dentro de ese plazo, la transferencia se cancela y el dominio sigue con tu registrador actual. En ese caso, puedes volver a iniciar el proceso en cualquier momento

Transferir tu dominio a otro proveedor puede aportarte ventajas como:

– Mejores precios de renovación.

– Mayor seguridad (DNSSEC, protección WHOIS, bloqueo de transferencias).

– Gestión unificada si concentras todos tus dominios en una sola cuenta.

– Soporte técnico especializado, disponible cuando lo necesites.

Si el código EPP no es válido, la transferencia no se completará. Recibirás una notificación indicando el error y deberás abrir un ticket aportando un código EPP válido para que podamos efectuar la transferencia.
En caso de no tenerlo, deberás solicitarlo de nuevo a tu actual registrador.